Unas 900.0000 personas perdieron su trabajo en todo el país durante la cuarentena

según un informe que prepara la Universidad Católica Argentina (UCA) sobre la pandemia de Covid-19, a la vez que pronostica mayor impacto luego de que se retire la asistencia estatal.

El director del Observatorio de la Deuda Social de esa universidad, Agustín Salvia, dijo que en el período los más afectados fueron los trabajadores informales, pero que el mayor impacto para el empleo en blanco llegará más adelante cuando se retire la asistencia del Estado a empresas privadas.

Sobre la base de una encuesta a 500 hogares y estimaciones que parten de datos oficiales ya publicados, la UCA trabaja en estimar cuál fue el costo en materia de empleo.

Aunque la encuesta sólo cubre el área metropolitana de Buenos Aires, sobre la base de proyecciones por sector pueden calcular el impacto en todo el país.

Entre autónomos y empleadores formales, según la UCA, se perdieron 120.000 puestos de trabajo. Los asalariados formales disminuyeron en 150.000 posiciones; la caída en los asalariados informales fue de 180.000 puestos; los cuentapropistas no profesionales informales perdieron 160.000 puestos y la mayor caída se dio en los puestos más vulnerables, los trabajos eventuales, de supervivencia y changas, que sufrieron 250.000 bajas.

Según Salvia, a lo largo del período de aislamiento social se fueron dando golpes sucesivos que fueron afectando a distintos tipos de trabajadores.