Se encamina una buena pelea

Este fin de semana tan sólo tuvo un protagonista en el ámbito boxístico, aunque fundamental. La estrella inglesa de peso pesado, Anthony Joshua, se presentó por segunda y última vez en 2018.

Enfrente estaba un veterano noqueador, quien en 35 peleas tan sólo cayó en una. El ruso Alexander Povetkin, fue una nueva prueba de fuego para el campeón OMB, AMB y FIB. Las aguas comenzaron agitadas en el estadio de Wembley (Londres) con un Povetkin agresivo y muy certero a la hora de atacar. Manejó la corta distancia y conectó buenos golpes curvos, junto con uppercuts que lastimaron y mucho al local.

Joshua debía salir con la mano en alto, ya que los fanáticos del boxeo esperan que se concrete una mega pelea con el estadounidense Deontay Wilder (40-0/39KO), quien ostenta la faja CMB de peso pesado. Por suerte para el boxeo, y su negocio, en el comienzo del séptimo asalto se despertó el favorito. Tiró una gran ráfaga de golpes y dejó muy sentido a su rival. Hubo cuenta por parte del referí, pero al continuar las acciones, el inglés volvió a atacar y de esa manera el tercero arriba del ring decidió que Povetkin no estaba en condiciones de seguir combatiendo.

Un escenario colmado vio como el oriundo de Watford festejaba su triunfo número 22 y sigue derrotas. Ahora se espera que de una vez se concrete la verdadera pelea de la máxima categoría, la que la gente quiere ver: Joshua vs Wilder.