YPF aumentó sus naftas por un impuesto al Dióxido de Carbono

Pese al congelamiento vigente, la petrolera estatal subió los precios al trasladar el impuesto al Dióxido de Carbono que había sido estipulado por una resolución de la AFIP.

Las naftas de YPF aumentarán un 0,24% como consecuencia de la aplicación del impuesto al Dióxido de Carbono. De esta manera, el precio del litro de nafta súper subió 13 centavos, a $55,47, y el litro de nafta premium, bajo la marca Infinia, se incrementó 15 centavos, a $ 61,69. Asimismo, se espera que otras empresas petroleras sigan el mismo camino, ya que es habitual que cuando YPF aumenta sus precios las demás compañías también.

La decisión de YPF se conoció a pesar de que en los últimos días el Gobierno había dado señales de que no avalaría un alza en el precio de los combustibles. En concreto, el sábado fue publicado en el Boletín Oficial el decreto 196/2020, que disponía el diferimiento en la aplicación de los impuestos a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono. Según se explicaba en el sector, se entendía que el congelamiento de los precios iba a extenderse durante los 180 días de la emergencia económica.

En sus considerandos, el decreto señaló que las decisiones oficiales tendientes a que las modificaciones impositivas no impacten en los precios “han obedecido a la necesidad de brindar una respuesta inmediata frente a las actuales circunstancias coyunturales y de estabilizar los precios de los combustibles comprendidos en su alcance”. Asimismo, agregó que “a efectos de encontrar soluciones de mediano y largo plazo, el Poder Ejecutivo Nacional continúa analizando de manera integral la actualización de los montos de los impuestos regulados en el Título III de la Ley N° 23.966, texto ordenado en 1998, para su futura adecuación”.

El decreto, que lleva la firma del presidente Alberto Fernández y de los ministros de Economía, Martín Guzmán, y de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, concluyó que “resulta oportuno, en esta instancia, disponer un nuevo diferimiento de los incrementos en los montos del impuesto sobre los combustibles líquidos que han sido prorrogados”.

De este modo, la caída en el precio internacional del barril de petróleo ayudó a reducir el retraso tarifario que, según entendían en el sector, se registraba por los diferimientos de los aumentos decididos por el gobierno. La baja del precio internacional generó que ese retraso disminuya desde el 16% al 5%, según estimaciones.