La central nuclear de Zaporiyia volvió a quedar desconectada de la red eléctrica

Lo confirmaron Ucrania y Rusia, que se acusan nuevamente de los últimos bombardeos en la zona. “Es necesario reparar y restablecer el funcionamiento de las líneas de comunicación de la planta con el sistema eléctrico”, informó la operadora energética ucraniana Energoatom.

 

Foto: AFP

 

La central nuclear de Zaporiyia, ubicada en el sur de Ucrania y anexada por Rusia tras ocuparla militarmente en marzo, volvió este sábado a quedar desconectada de la red eléctrica externa tras los últimos bombardeos en la zona, confirmaron Ucrania y Rusia que se acusaron nuevamente de esos ataques.

La operadora energética ucraniana Energoatom indicó que “la última línea de comunicación con el sistema eléctrico quedó desconectada” y que la central ahora funciona únicamente con generadores diésel de emergencia.

El administrador ruso de Zapioriyia, Vladimir Rogov, también confirmó la desconexión de la central “como resultado del bombardeo de las tropas ucranianas”.

El Gobierno ucraniano estima que la central nuclear, la más grande de Europa, solo podrá funcionar de esta manera durante diez días.

“Es necesario reparar y restablecer el funcionamiento de las líneas de comunicación de la planta con el sistema eléctrico”, de acuerdo con el comunicado que Energoatom subió a su página de Facebook y que citó la agencia de noticias Europa Press.

El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) también informó que la central “perdió su última fuente de energía externa restante debido a la reanudación de los bombardeos y ahora depende de generadores”.

“La reanudación de los bombardeos, que afectan a la única fuente de energía externa de la central, es tremendamente irresponsable”, apuntó el director general de la agencia nuclear de la ONU, el argentino Rafael Grossi.

“Pronto viajaré a la Federación Rusa, y luego volveré a Ucrania, para acordar una zona de protección de la seguridad nuclear alrededor de la central. Es un imperativo absoluto y urgente”, añadió el directivo, que estuvo esta semana en Kiev y la próxima se trasladará a Moscú.

El OIEA recordó que los seis reactores están apagados en frío, pero requieren de electricidad externa para funciones vitales de seguridad y protección nuclear.

Considerada como uno de los grandes puntos estratégicos de la guerra, Rusia y Ucrania llevan acusándose prácticamente desde el inicio del conflicto de efectuar bombardeos que dificultan constantemente el funcionamiento de la instalación.