El Gobierno postergará el impuesto a los combustibles

Esta decisión se llevó a cabo con el objetivo de bajar la inflación a corto plazo, sin embargo, no impide a las empresas petroleras realizar subas en las tarifas. 

El aumento que estaba previsto a partir del 1 de junio se trasladará al mes siguiente. El impuesto iba dirigido hacía los combustibles, lo que luego impactaría en los precios de las naftas y el gasoil que pagan los consumidores en las estaciones de servicio.


Sin embargo, como la medida no excluye aumentos de las empresas privadas, estas seguramente aumenten las tarifas según sus intereses comerciales y trasladen la inflación de junio al próximo ajuste en julio. Por lo tanto, la suba del 4% que estaba prevista se reducirá considerablemente.

De todos modos, esta medida es solo una postergación. El objetivo que persigue el Gobierno es controlar los precios a futuro,  por el impacto que tienen los combustibles en todo el sistema productivo.


En este año electoral, es la segunda vez que el gobierno toma medidas en relación al Impuesto sobre los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, que iba a aplicarse cuatro veces al año: en marzo, junio, septiembre y diciembre. En Marzo, Cambiemos ya había dividido la aplicación del impuesto en un 50% en marzo y 50% en abril.